lunes, 4 de noviembre de 2013

AMIGOS, VIEJOS AMIGOS

Lo único bueno que tienen las personas son los viejos amigos, y sobre todo cuando después de tiempo sin verlos los vuelves a recuperar, por decirlo de alguna manera. Aunque en esta sociedad en la que los valores y principios pasan a segundo plano y eso de recordar no está de moda y todos miran al mañana y se olvidan del presente y de los buenos días vividos, sobre todo los que tuvimos la suerte de sobrevivir a los finales de los 70 y los 80. Ahora sólo hay recuerdos políticos y de rencor, los otros recuerdos, ¿qué recuerdos?

De repente un día te das cuenta de los años que tienes y empiezas a hacer un resumen de tu vida y por arte de "un nosequé" te encuentras con uno de tus amigos de tus años "mozos", ese amigo tiene el teléfono de otro u otra, ahora que esta tan de moda especificar el sexo, en castellano, y no el género, ese anglicismo tan politicamente correcto.

Bueno, a lo que estamos, así sin darnos cuenta un día preparamos una comida y empiezan a aparecer aquellas personas que un día formaron parte de tu juventud, de la que me acuerdo, hay otra parte de la que tengo lagunas pero ese es otro tema. Vemos como el tiempo y la vida nos ha tratado a cada uno, pero en el fondo y lo verdaderamente importante es el tiempo, los momentos que vivimos juntos y ese el poso que nos queda hasta el fin de nuestros días.

Entre platos, botellas de vino y "copazos" volvemos por un momento a aquellos días en los que las únicas preocupaciones eran saber como la ibamos a liar el fin semana.

La tarde va pasando y las preocupaciones diarias pasan a un segundo plano, ya que por un momento vuelves a vivir aquellos inolvidables momentos y el : "Te acuerdas del día que..........." es el tema de las conversaciones que surgen.

Te das cuenta de la suerte que hemos tenido los que teníamos un pueblo donde pasabamos el verano y los fines de semana, un pueblo donde aprendimos y descubrimos la vida y otras cosas. El poder volver y reencontrarte con una parte importante de tu vida, donde ves que en el fondo vivir de los recuerdos unas horas no es malo, todo lo contrario es una alegría y que narices me encanta.

A todos gracias de corazón.